Valoraciones de vivir en Nueva Zelanda.

Hay un lugar que desde pequeño siempre rondó en mi cabeza, quizás porque siempre sentí cierta predilección por lugares remotos y perdidos, o quizás también porque era un ferviente fan del señor de los anillos (película que ayudó a popularizar el nombre de este país). Mientras contemplaba foto tras foto, algo me hacía pensar que este no era un lugar que se debía visitar; este era un lugar que se debía vivir en él.

En una llamada hacia lo salvaje, hacia el autentico contacto con la naturaleza, me mirada se posó sobre Nueva Zelanda. Un país perfecto para vivir, para viajar y para experimentar cientos de aventuras. En mi afán por cumplir los sueños que desde pequeño rondaban por mi cabeza, empecé a planear lo que sería una de las grandes aventuras de mi vida.

En este artículo hablaré de la vida en Nueva Zelanda a través de mi propia experiencia, lugar donde viví durante un año, hablaré sobre las ventajas e inconvenientes de vivir en este país, cómo es la vida allí, cómo pasan el tiempo sus habitantes, así como otros detalles curiosos que hacen que la vida allí merezca ser vivida día tras día.

¿Por qué Nueva Zelanda?

Cuando pensamos en un lugar idílico para vivir, solemos tener varios factores en cuenta. Los dos que más peso tienen suelen ser el factor económico y el climático. Que el país presente un buen PIB es un factor ventajoso a la hora de elegir nuestro siguiente destino, a fin de cuentas, muchos de nosotros buscamos tener una mejor calidad de vida que en nuestro país de origen. Pese a todo, la experiencia me ha demostrado que un país con un alto PIB no es sinónimo de calidad de vida (al menos dependiendo de lo que usted entienda por calidad de vida).

Otro factor muy a tener en cuenta es el clima, como ya sabemos los españoles y los latinos no estamos muy acostumbrados al frío. Poca gente he visto que eche de menos el frío, aunque sobre gustos no hay nada escrito. La gente que elige Nueva Zelanda para vivir no suele fijarse tanto en el factor económico o climático, sino en lo que la propia naturaleza tiene para ofrecer.

¿En qué lugar del mundo puedes hacer surf por la mañana, ir a pescar por la tarde, esquiar los fines de semana, y dormir en un refugio en medio de la montaña?

Si tu corazón empieza a palpitar, es que Nueva Zelanda es el destino ideal para ti.

Cultura kiwi.

Si algo he aprendido de los habitantes de este país, es a no magnificar los problemas. Nunca vi a gente que le importe tan poco lo que piensen los demás. Muchas veces intentamos proteger nuestro ego para tener una mejor imagen de cara al público, en Nueva Zelanda, sin embargo, no se pretende impresionar a los demás para quedar bien o estar por encima del resto. Lo que más se valora es compartir el momento.

Aunque Nueva Zelanda tiene algo de vida nocturna y unos pocos festivales, la verdad es que los habitantes prefieren hacer otro tipo de actividades al aire libre. Hay muchos clubs de excursionistas que organizan salidas cada fin de semana, por otro lado, el gobierno de Nueva Zelanda ha fomentado el turismo activo en los últimos años, construyendo más de 900 refugios donde poder pasar la noche si estamos de excursión por la montaña. Para llamar más la atención, también han creado una red de senderos con su propio top ten, ellos los llaman great walks, y en teoría aquí se encuentran los paisajes más bellos.

Siempre pensé que este país es perfecto para alguien que busque la tranquilidad, siendo además uno de los países más seguros del mundo, aunque, claro está, también tiene sus zonas rojas que más vale evitar, pero estas zonas aun así son más tranquilas que muchas ciudades de Latinoamérica.

El principal atractivo de este país es que tan solo viven 4,5 millones de habitantes, esto significa que posee grandes extensiones de territorio donde prácticamente no vive nadie. Si lo que te gusta viajar por carretera, no tendrás que sufrir los tormentos del tráfico, podrás relajarte y disfrutar del paisaje mientras conduces.

El dinerito.

Esta claro que una de las primeras preguntas que se nos viene a la mente cuando vamos a empezar a trabajar es: ¿cuánto voy a cobrar? Y lo cierto es que esto era algo que me echaba para atrás cuando me quise ir a Nueva Zelanda, otros mochileros que había conocido antes me habían avisado de lo bajo que eran los salarios, y que debía trabajar duro si quería ahorrar algo para poder viajar más tarde. Por fortuna, la cosa fue cambiando en los últimos años, cuando llegué en febrero del 2019 el salario mínimo estaba en 16,60 NZD la hora, en abril del mismo año, el salario subió a 17,70 NZD la hora. En 2014 el salario mínimo estaba en 14,25 NZD, después del 1 de abril de 2021, el salario mínimo estará en 20 NZD. Esto representa un incremento de un 40% en 7 años. Lo que pronostica una buena seguridad al trabajador.

Aunque el dólar neozelandés no es tan fuerte, lo cierto es que con 20 NZD la hora puedes llevar una buena vida en este país, e incluso ahorrar dinero para futuros viajes. Además de esto, hay que tener en cuenta que el salario medio en Nueva Zelanda es de 25,50 NZD la hora.

Los sectores más demandados en este país son la hostelería y el turismo sobre todo en la isla sur, el IT en ciudades como Auckland y Wellington, y todo el sector de las materias primas. Este último es un sector donde caen muchos mochileros ya que la oferta es bastante tentadora si se quiere ahorrar dinero rápido, por un lado, tienes que trabajar 6 días a la semana entre 9 y 10 horas al día, por otro lado, el beneficio de cobrar por hora y no tener que invertir en mucho para vivir durante ese tiempo, hace que los jóvenes decidan trabajar unos meses allí para después marcharse con las cuentas llenas.

Sobreviviendo en las islas.

Como ya he mencionado, Nueva Zelanda no es un país que tenga demasiado ocio, no obstante, ciudades como Wellington o Auckland tienen un gran abanico de eventos y festivales, también la pequeña Queenstown es un lugar donde siempre pasa algo, al ser el destino preferido por miles de jóvenes turistas.

El supermercado mas famoso de Nueva Zelanda es el Countdown, aunque el premio al más barato por votación general es para el pak’n save. Una vez en el país, podremos comprobar que muchos productos del supermercado vienen de Australia, allí tienen mucha más industria que en Nueva Zelanda. Comprar cosas como queso o sandía es prácticamente un lujo, por no hablar del alcohol o el tabaco, que puede llegar a destruir todo nuestro salario. Es por eso que emigrar a Nueva Zelanda puede ser un buen momento para dejar el alcohol y el tabaco.

Este país no es que tenga mucha cultura gastronómica, diría que el “pie” es uno de los manjares que más nos vamos a encontrar, seguido del superconocido “fish and chips”. Si nos adentramos un poco más en su cultura, veremos que en ciertas regiones han elaborado sus propios platos, un ejemplo claro es la “tortita de whitebait” que podemos encontrar en la costa oeste de la isla sur. Pese a todo, como Nueva Zelanda es un país multicultural, es fácil encontrar comidas de otras partes del mundo; lo que más encontré fueron restaurantes asiáticos.

tortita de whitebait…rico.

Me quiero mover.

Si no cuentas con un vehículo propio en Nueva Zelanda, moverte va a ser bastante complicado, a día de hoy el transporte publico no esta tan desarrollado como en otros países, esto se debe a que tampoco se fomenta su uso. Por poner un ejemplo, Auckland tiene un tráfico terrible para ser una ciudad que cuenta con menos de 2 millones de habitantes, cuando vivía allí me fijé como mucha gente coge el coche cada día para ir a trabajar sin ninguna compañía, de esta manera, si todos optan por el mismo medio de transporte, las congestiones de tráfico acaban siendo inevitables.

Así pues, el bus es la única opción que tenemos si no disponemos de vehículo propio, en la mayoría de ciudades el servicio es aceptable, pero en Auckland, al ser una ciudad tan extensa, las pocas conexiones de buses que existen hacen que moverse de un punto a otro pueda llevar incluso horas.

No obstante, la mayoría de la gente opta por tener su propio vehículo, ya que las distancias son largas y muchas casas quedan lejos de los servicios básicos. Lo mejor de todo es que conseguir un coche de segunda mano puede resultar bastante económico, el precio por uno que todavía funciones oscila entre 2000 y 3000 NZD, nada mal para para empezar a moverse por allí.

El lado oscuro.

Está claro que no existe todavía un país que se le puede llamar EDÉN, una utopía donde todo esté permitido y todo se pueda conseguir. Nueva Zelanda, como cualquier otro país, tiene sus normas, estas protegen la pequeña economía de Oceanía, algo ventajoso para el local, pero muy problemático para el inmigrante. La realidad es que es relativamente fácil llegar a este país para viajar o para trabajar temporalmente, pero las opciones para emigrar son un poco más duras. El primer paso es conseguir una residencia temporal a través de una empresa que te esponsorize, después de años y esfuerzos, podremos conseguir una residencia permanente. Como siempre digo, es algo difícil pero no imposible.

No obstante, debemos pensar que su buena economía se debe en parte a un paulatino crecimiento demográfico, romper esta tendencia podría acabar en una mayor desigualdad social.

Otro factor que mucha gente critica de nueva Zelanda es su elevado coste de inmuebles, si optamos por alquilar, el coste de un departamento puede llegar a los 300 o 500 NZD a la semana, con Auckland y Queenstown como los lugares más caros para vivir; y Christchurch, Nelson o Wellington como los lugares más económicos. Si queremos ahorrar algo mientras trabajamos allí, la mejor opción sería rentar una habitación, lo que nos puede costar entre 200 y 300 NZD a la semana.

Si prefieres invertir tu dinero en tu propia casa, puedes echar un vistazo a los datos que nos muestra REINZ, el instituto de bienes e inmuebles de Nueva Zelanda, en él podemos observar que la media del coste por vivienda es de casi 600.000 NZD, con su mayor pico en Auckland con un precio que alcanza los 850.000. Esto es un aumento del 6,8% con respecto al año anterior (2018-2019).

Este hecho resulta bastante interesante, ya que los primeros colonos no creo que pagaran tanto por estas tierras. Pero hoy día el valor por metro cuadrado en nueza Zelanda está mucho más valorado que antes. Esto se debe, en parte, a su clara obstinación por conservar el medio ambiente. En este país no vas a encontrar muchos bloques de apartamentos o pisos, ya que lo que más abundan son las casas.

La experiencia está garantizada.

Definitivamente, ahora es el mejor momento para emigrar a Nueva Zelanda, los salarios son muy competentes y su calidad de vida es una de las mejores del mundo.

En mi opinión, es uno de los mejores lugares donde vivir una vida tranquila disfrutando de la naturaleza, un lugar donde no hace falta desear ni pedir mucho, un lugar donde poder vivir sin prejuicios ni pretensiones. Doy por hecho que también tiene sus cosas negativas como cualquier otro país. Si no me quede allí fue porque sentía que tenía que seguir experimentando, buscar nuevas sensaciones y aventuras, ese cambio de rutina es siempre un principio de incertidumbre, ya que lo nuevo puede ser mejor o peor que lo viejo, para mí siempre vale más la pena intentarlo, ya que sin la experiencia nunca se alcanzaría el conocimiento.

Y al final, una vez aprendida la lección, darnos cuenta que lo más importante no es el lugar donde elegimos estar, sino la actitud con la que elegimos vivir.

marian lake

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